LA INVENCIÓN DE HUGO
Para mi la película representa la frase de "sólo muere quien es olvidado", porque Georges Mélies estaba muerto como ser humano, me refiero, estaba triste, melancólico, echaba de menos sus años de artista e infravaloraba su obra hasta que le recordaron que era un genio, y fueron sus seguidores y Hugo (que en parte también era seguidor suyo porque veía El Viaje a la Luna con su padre) quienes le mostraron la magnitud de lo que había hecho como artista, y hoy es mundialmente conocido por ello.
Mi escena favorita de la película creo que es la persecución del guardia por la estación, porque muestra toda la genialidad de la película. Los coloridos, variedad de personajes, la música... describen el ambiente de un París como el de Amélie, en el que me habría encantado vivir. Por otro lado, la escena con más carga emocional para mí es el final, cuando Méliès presenta su obra y Hugo se siente orgulloso de haber cumplido con el legado de su padre. También tiene mucha magia el momento en el que se cuelan en el cine y la joven descubre las maravillas del mundo del cine. Como anotación el vestido que lleva la niña en la escena final en la fiesta en casa de los Méliès de los años 20-30 me parece precioso. En general todo el vestuario de Isabelle durante la película.
Lo que nos mantiene intrigados hasta el final es el misterio de qué relación hay entre Méliès y el autómata, y cómo funciona este.
Es una película dirigida por Martin Scorsese, que sólo por esta película obtuvo tres veces el premio del Globo de Oro al mejor director, y otros premios de numerosos festivales de cine de todas partes del mundo como por ejemplo el de Broadway. Su carrera abarca más de cincuenta años, durante los que ha ganado numerosos premios de todo tipo como el óscar a la mejor dirección en 2007. Es también el director del musical New York New York, El color del dinero y (esta es posterior a la de Hugo) El Lobo de Wall Street .
La película fue un éxito rotundo; obtuvo el Óscar a la mejor fotografía. Óscar a la mejor dirección artística, Óscar a la mejor edición de sonido, Óscar al mejor sonido, Óscar al mejor montaje, el premio de Art Directors Guild a "Period film", el premio al mejor director por la Boston Society of Film Critics award, premio que obtuvo en otras dos ocasiones en los globos de oro y en Florida Film Critics Circle Awards, los premios BAFTA al mejor sonido y a la mejor producción, y los dos actores principales obtuvieron el premio al mejor interpretación en un largometraje y a la mejor actriz en un largometraje en los Premios Young Artist.
Esta película va dirigida a todos los públicos, porque el protagonista es un niño, un punto importante ya que esto une la realidad de los niños con el mundo "real" de los adultos, sus juegos, investigaciones... Además, no hay edad para soñar y creo que esa es la principal enseñanza de la película.
Es una película de aventuras, y al mismo tiempo tiene la dosis justa de drama para emocionar y sobrecoger al espectador sin llegar a hacer que se sienta triste.
La historia está muy bien pensada, ya que une el universo de los niños, en el que todo son aventuras y retos con la historia del cine, se explica muy bien en la película que todo empieza con los hermanos Lumiére, ensña sobre la vida de Georges Méliès y de algún modo transmite al espectador la magia de hacer cine, de crear cosas imposibles en la vida corriente como estrellar un cohete en un ojo de la luna.
A mí al menos no me ha costado entender la película, y es una trama muy bonita.
Al mostrar partes de la vida tanto de Georges Méliès como del pasado de Hugo y como de la guerra, tiene una línea del tiempo definida pero introduce hechos pasados a modo de flashbacks.
El conjunto de la narración es realista, de hecho está basado en hechos reales en todo lo relativo a Méliès, todo fue en realidad como se muestra en la película exceptuando al personaje de Hugo y todo lo relacionado con él. Méliès realmente tuvo aquel gran estudio de cristal, y realmente grabó todas las películas que aparecen. También vivió la guerra y perió el dinero, el estudio, los actores, muchas de sus películas y perdió la esperanza. Y realmente trabajó en la juguetería de la estación hasta que falleció.
Me siento identificada con la película porque he sido los dos personajes. He sido la que le ha devuelto la esperanza y las ganas de soñar a algunas personas como hizo Hugo, y en una ocasión también me perdí del todo y mis amigos me devolvieron la esperanza, como Méliès.
La interpretación de los actores me parece sublime, sobre todo a edades tan tempranas porque al fin y al cabo los protagonistas son dos niños. Cabe destacar que el personaje que tiene el guardia es un puntazo, aporta la nota de humor a la película.
El personaje que más me ha gustado es Hugo, por su forma de ver el mundo y de actuar.
La película me parece una obra de arte, y además me encanta porque une estilos o conceptos que me gustan muchísimo: los años 20-30, Francia (París), la fotografía es preciosa, la historia, el cine (como mundo), y lo que tienen todas mis películas favoritas: una atmósfera basada en la realidad pero que no termina de ser el mundo real. Además me parece que muestra muy bien la utilidad del arte en el mundo; podemos ver que el Georges Méliès que lleva el cine dentro es totalmente distinto del que trata de olvidarlo y deshacerse de él. Otro hecho que me encanta en las películas es que la banda sonora sea buena, y esta es de las mejores que he escuchado. Aparte de la propia banda sonora de la película, la oficial, incluyen piezas de música clásica (que encima son de mis favoritas) como la Danza Macabra de Saint Saëns cada vez que habla de la historia del cine, la polka de Strauss, el jazz propio de la época durante una de las persecuciones por la estación... La banda sonora oficial de la película es preciosa, y en los títulos de crédito canta Zaz, una de mis cantantes preferidas, francesa. Por último cabe destacar la palabra soñador, que es como definiría a todos los personajes de la película y a los artistas en general, porque sólo un soñador sabe que no hay nada imposible, y que puede hacer realidad todo lo que se proponga. Y si no existe, como nos enseñó Georges Méliès, habrá que crearlo.
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